Unas largas tres horas nos separan del parking de las granjas de Astau, en Francia, lugar donde aparcaremos el coche para realizar algunos montes de la zona:
- Grand Quayrat
- Pico Lezat
- Perdiguero y sus pitones (3 cimas)
- La cresta de Los Literola (4 cimas)
- Los dos Crabioules
- Punta Mamy
El primer día, ascenderemos por el gran camino hasta el Refugio de Espingo. Itinerario de algo más de dos horas que resulta bastante factible por la tarde, ya que gran parte del mismo transcurre por la sombra. 2h.
El segundo día, ascenderemos al Gran Quayrat (ruta).
El sendero se aventura por las paredes del este del monte, encontrando, y remontando, por lo más asequible los diferentes contrafuertes que defienden la cima. De una forma algo abrupta, nos llevará hasta la cresta entre el Petit y el Gran Quayrat.
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| En rojo la suida con tres trepadas además de la cresta. En verde la bajada directa a Portillón. |
Siguiendo la cresta, llegaremos a una trepada de II+ que nos dará acceso a la ante-cima. Un aéreo cresterío, no apto para domingueros, nos da acceso a la gran piedra que constituye la cota más alta. La subida a la piedra cimera requiere también de cierta pericia y experiencia.
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| La cresta final y la cima al fondo. |
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| En la piedra cimera |
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| Deshaciendo nuestros pasos. |
Tras pasar el contrafuerte, atravesaremos una pedrera de grandes bloques sin perder ni ganar altura hasta alcanzar la ribera de un río. El camino transcurre por la misma ribera hasta que llegamos a la base del mismísimo refugio, al cual accederemos siguiendo el trazado que mejor nos parezca.
Por la tarde, tras descansar un poco, ascenderemos al Pico Lezat (ruta). Para ello, cruzaremos la presa y seguiremos el camino que nos lleva hacia el Portillón de Literola. Realizaremos algunas zetas dejando el monte a mano izquierda y, cuando se suaviza la inclinación, hay que virar a mano izquierda. Hoy, existen un par de grandes hitos que se desvían del camino evidente. Veremos en el primer contrafuerte un pequeño canal diagonal de color más blanco que el resto de la roca. Hacia allí deberemos orientar nuestros pasos y esfuerzos siguiendo, siempre que se pueda, la línea de hitos.
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| Crokis de la subida. |
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| Otro crokis, desde otra perspectiva. |
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| Detalle de los canales. |
Una vez superado el canal blanco, tendremos a la vista el segundo y último contrafuerte. Recorreremos la pedrera hacia la derecha, hacia un gran canal herboso. A los pocos metros de comenzar por el canal herboso, tomaremos un desvío que nos levará poco a poco a la izquierda. Cuando ya no hay hierba, y solo encontramos piedras, debemos realizar una travesía horizontal a mano izquierda para cruzar un par de canales. Entonces seguiremos ascendiendo. Cerca de la cresta, nos encontraremos con una bifurcación en forma de "Y", y deberemos optar por el canal de la izquierda. Si se toma cualquier otra canal anterior, al llegar a la cresta nos daremos cuenta de nuestro error (básicamente por la dificultad de la misma) y tendremos que descender para buscar el canal correcto, siempre hacia la izquierda, en dirección a la cima.
Una vez en la cresta, un sencillo camino nos llevará a la cima del Pico Lezat. Si este camino no es tan sencillo, probablemente nos hayamos confundido de canal. El descenso se realiza en sentido inverso por el mismo camino.
El tercer día, ascendemos directamente al Pico Perdiguero y a sus pitones Este y Oeste (ruta completa hecha a mano).
Coincidiendo con el descenso, decidimos realizar la cresta de los Literola y así ascender cuatro cimas más:
- Tuca del Paso alto de Literola
- Tuca Roya
- Tuca de Literola
- Aguja de Literola
La bajada de la Tuca de Literola al collado del Portillón de Literola pasando por la aguja es el tramo más delicado y conviene andar con mil ojos y no pecar de exceso de confianza.
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| Perdiguero y los Literola desde Crabioles Occidental. |
Ya en el collado, decidimos ascender a la cresta de enfrente para realizar los dos Crabioules y la punta Mamy,
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| Crokis de los Crabioles desde la Aguja de Literola. En rojo la subida desconocida y en verde la bajada. |
Desde el mismísimo collado seguimos unos hitos que nos acercan a la pared por la izquierda. Entonces, comenzamos a subir por un canal y en un momento dado desaparecen los hitos de nuestra vista. Nosotros seguimos el camino más intuitivo, pero que no parece el correcto (a veces la intuición juega malas pasadas). Ascendemos realizando alguna que otra trepada algo expuesta y con riesgo de caída de piedras. Al alcanzar la cresta tras el esfuerzo, constatamos que efectivamente hemos errado, y que ningún hito se dirige al canal por el que llegamos. Ascendemos directamente al Crabioules Occidental y, recorriendo una aérea cresta con pasos algo delicados, llegamos a la cima Oriental. Muy aconsejable llevar cuerda para este tramo, al menos para progresar en ensamble.
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| En el Crabioles. |
Para descender, de vuelta al Crabioules Occidental, seguimos la cresta en dirección oeste y, poco a poco, aparecerá un camino que nos permitirá llegar al collado de Mamy de una forma bastante cómoda. Existe un rápel para facilitar la bajada. Este mismo itinerario se puede utilizar también para subir.
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| Detalle de la bajada. El rapel en morado, |
Desde el collado, abordamos la Punta Mamy directamente en línea recta, es mucho más fácil de lo que parece.
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| En la Punta Mamy. |
Después, volveremos al collado de Mamy para descender por la brecha Mamy hasta la pedrera, dónde seguiremos el camino de descenso hasta el refugio.
El cuarto día, cogeremos nuestros bártulos y bajaremos hasta el aparcamiento para volver al Valle de Tena, dónde me espera mi siguiente gran aventura, la gran cresta de Diablos-Costerillou al Balaitus.
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